jueves, 19 de enero de 2012

Entré a saludaros.

Hola, soy yo, sí, Marsa. Pasaba, me detuve y entré.

Los ordenadores juegan a veces malas pasadas: pierden informaciones muy necesarias, direcciones muy queridas, ocultan nombres que tuvieron voces intensas con derecho a la intimidad... poseen demasiado poder, independencia, voluntad propia... ejercen su inesperada autonomía.

Al entrar al café compruebo que estuvisteis celebrando las fiestas navideñas con los acostumbrados buenos deseos de una nueva y mejor vida para este mundo y especialmente para los que hace algún tiempo éramos asiduos contertulios. Y también hemos vuelto a renovar otro año: el número 12 del segundo milenio... impresiona un poco. A mi me impresiona por lo menos, porque el cansancio me acosa cada vez con mayor asiduidad... me he vuelto perezosa tanto física como mentalmente. Cada vez leo y escribo menos y cada vez veo más cine online. También paseo menos porque cada vez me canso más. Mis hijos me miman más y mi círculo de amigas se ha reducido bastante.

Pues yo también quiero desearos felicidad en este año que acaba de comenzar. Salud para el cuerpo e ilusiones para el alma. Paz y Amor para todos y, sin querer pecar de ilusa, capacidad para mejorar las relaciones entre los humanos. Este mundo ya me cansa a fuer de ser incorregible.

Un abrazo muy fuerte para todos. Estad seguros que mi afecto por vosotros perdura a pesar de mis pesares.

3 comentarios:

abi dijo...

Marsa entró ayer. Curioso, me acerco hoy al café. Me pasa como a Marsa, será producto del paso de los años y no muy buena salud.

Les dejo los mejores deseos y que disfruten lo que más puedan de cada situación agradable que les toque vivir.

Hasta siempre amigos.

Laura dijo...

Ha sido muy grato reencontrarse con antigu@s contertuli@s de paso por aquí. Espero que sus vidas sean venturosa y nuevos vínculos renovadores les esperan a la vuelta de la esquina.

¡Un gran abrazo para tod@s!

Elvi dijo...

Que sorpresa hermosa Marsa!!!

Uf los achaques....y vienen nomas con el tiempo,gracias por acercarte al Mozart,todo encuentro es un reencuentro.

Abrazos atrasados y muchos para vos querida compañera de tertulias.
Hasta lueguito,me gusta decirte asi.