martes, 17 de mayo de 2011

Aparezco

Me ha costado mucho ubicar donde funciona el Mozart; he recorrido calle Lastarria, Rosal, Villavicencio y otras pero nada. Quizá Laura podrá endilgarme porque conoce ese barrio o quizá Elvi me pueda dar alguna pista, desde lejos..
Estoy sorprendido tanto de la acogida de Elvi, como de las palabras de Laura que señala muy certeramente mis apariciones sorpresivas, fugaces , brevísimas…
Debo confesar que ha sido muy grato para mi regresar al inubicable Mozart, porque me ha permitido recordar pasadas conversaciones con las chiquillas ( sí, dije chiquillas ) por chat que aún permanecen en memoria.
Ustedes me saben tímido y no se equivocan, de modo que ya estas breves palabras me están pareciendo excesivas, por ahora

3 comentarios:

Elvi dijo...

Sos un encanto Fidel,y te felicito yo no puede hacer una entrada nueva en el Mozart,solo puedo desde comentarios,sos un"genio"!!!!!!
Y si...no es la edad cronologica ..es la edad mental..y me siento asi como decis...chiquilina!!!
Sabes tu breve pero eficaz entrada aqui,me hace pensar en que nos diste un "piquito" esos besitos suves y rapidos en los labios(que tal?) me gusta jugar, y me mando cuando encuentro personas como vos tan especiales para mi.
Habras leido tal vez...que estoy coordinando un grupo de adultos mayores,me gusta lo insolito,lo diferente,me gustaria tu opinion al respecto,ya mandare mas datos al respecto.
Por favor segui viniendo,alegras a mi corazon,amigo de años,fiel...asi con la "f" del comienzo de tu nombre.
Nosotros los de ahora...somos los mismos de entonces...el Mozart es parte de mi vida...ustedes...vos sos parte de mi vida.
Un abrazo gigante Fidel,hace el esfuerzo de venir seguido...te estare esperando.

FIDEL dijo...

UN SALUDO AMIGA ENTRAÑABLE

Marsa dijo...

Queridos amigos, es una alegría encontrar en este rincón del Mozart a mis amigos, Elvi y Fidel saludándose gozosos, después de largo tiempo.
Pues parece que me llegaron vuestras voces y vine. Tal vez volvamos a encontrarnos con cierta frecuencia, si nos aprendemos bien el lugar y el momento.
Mis días se suceden con dulce tranquilidad y con la libertad más completa, sólo hago lo que quiero, cuando quiero y como quiero, y cada vez valoro más esta posibilidad. Mis compromisos son unicamente los de mi afecto, ya no tengo deberes, jejeje.