viernes, 26 de marzo de 2010

La amistad.

La amistad es quizás uno de los valores más rotundamente humanos. Con el tiempo comprendemos el sentido de tener amigos. Y no diferencio, jamás lo he hecho, entre amistad y eso que llaman amor. El amor es ambiguo, casi siempre excluyente, huidizo. El amor puede ser un miembro de la amistad. Quiero decir, el hermano ese, Cupido, o Eros, en fin, que va de la mano de su hermana mayor: la amistad. Esta es la verdaderamente importante. En ella uno se siente cobijado, protegido, pero también se siente poderoso, solucionador de conflictos, paño de lágrimas, y en la amistad el tiempo se hace relativo. Pueden pasar años y los amigos no se ven, no se llaman, y sin embargo allí están, cada uno con su peripecia. En el amor no, pasa un ratito y uno de los dos se olvida, se pierde, y truenan los dioses del Olimpo! Eso es egoismo, posesión. En la amistad no se fagocita a nadie. Y si se hace, es por un rato, lo que dura la líbido despierta. Eros acude a veces, impaciente, con su típico vestido de urgencias, pero luego todo se aquieta y vive ese encanto de compartir cosas, proyectos, recuerdos, sentires y pesares. Junto a una copa y un alimento sencillo y sagrado.
Lógicamente la sociedad no acepta estos parámetros. Son demasiado ajenos a este modo de pensar que viene de milenios. Va en contra del sacrosanto concepto de pareja, y se cree que pone en peligro la familia: es decir, los hijos. Pero la sociedad no debe temer a la amistad verdadera. Si un hijo puede alguna vez decir: mi mamá y mi papá son amigos, es la mejor declaración, la mayor y más feliz certeza.

Pero aún más. A quienes ya hemos dejado atrás el tiempo de merecer. Por un simple asunto de años. Más puede interesarnos el descubrimiento de la amistad más íntegra. Luchando claro está, contra todas las ideas reaccionarias casi siempre vinculadas a las religiones, defendiendo la cercanía de dos personas que se quieren, que se entregan, que han hecho del cariño su canto mayor.

7 comentarios:

Elvi dijo...

Me pregunto si la amistad se sostiene a si misma,en ella hay un misterio y un secreto,es un estuche seguro,el amor tambien es un secreto,porque no hay respuesta cierta a porque amamos.
En los amantes hay una complicidad sin testigos,la intimidad necesita del secreto,es como un escondite porque al tener un comienzo incierto,pareceria que tenemos un "secretario"personal que se hace cargo de los sentimientos y de las palabras que nos vulneran,y que nos acompaña todo el tiempo ayudandonos a recuperar la pasion que ha apaciguado la cultura.
La amistad y el amor,no se reduce a una explicacion,porque es una invitacion misteriosa para ser vivida,encierra desear lo que no sabemos..y lo que nunca sabremos,aun asi,algo nos incita a a acertarlo/a.
Ahi se conjugan las pasiones y las razones que viven dentro nuestro en una convergencia.
en la amistad y en el amor,la piel del otro es la experiencia de lo ajeno,y sentimos ese empuje que nos lleva mas alla de nuestros limites,y es la posibilidad de excederse de uno mismo,aunque..la mayoria de las veces se repite sintiendo lo mismo bajo otras pieles,es un ejercicio de una ausencia,es algo que nunca se alcanza,nuestros propios secretos lastimados,y surgen protestas eroticas,desenfrenadas,intensas,como algo dulce y maligno,como algo que hiere y repara,y creemos que es acceso a la felicidad perdida,a la manera del paraiso perdido, y nos sirve para resguardarnos de un presente que desdeñamos.
Y hay otro presente en esto,hoy,en la busqueda de la felicidad y el amor,es el ofrecerse como fetiche-mercancia que adquiere la ilusion de protegernos de los infortunios de la vida,la vida privada tambien se ha privatizado,y nuestra vida intima y privada es importante en la medida que pueda ofrecerse como una mercancia.
La economia de mercado tiene sus leyes y es prestando atencion en el espacio publico,en el afuera,donde tenemos que encontrar los valores de nuestra intimidad ,amigos y amores,porque las relaciones humanas hoy,se miden como una mercancia,y sus actividades se enuncian como un buen o mal negocio..y lo que es peor...que todo vale.
La sexualidad,el amor,la amistad paso a ser un preciado objeto de consumo transformando a todo esto en algo facil de ser intercambiado en el mercado de las relaciones sociales.
En cuanto a lo sexual,o la sexualidad que propone la cultura actual es la disociacion de los afectos,se pueden tener encuentros sexuales,pero eso si,que no intervenga la intersubjetividad.

Hay cosas que se saben...sin saber que se saben

Elvi dijo...

un error al tipear...donde dice acertarlo/a.
Es:.. encierra desear lo que no sabemos...y lo que nunca sabremos ,aun asi,algo nos incita a acaptarlo/a

Besotes a todos.

Elvi dijo...

jajaja..sigo errando porque sera?? jaja es :ACEPTARLO/A
Pucha che parece que me tocaron mis propias palabras.jejejeje.

Marsa dijo...

Necesaria y maravillosa amistad... ¡disfrutada tantas veces!

rolando dijo...

Creo que no me he expresado con la claridad que pensaba. No hay amigos y amantes, mejor dicho, no debería haberlos, hay amigos-amantes. Separar estos sentimientos es lo que yo rechazo. Y esta amistad-amor puede encerrar intensos misterios. Este sentimiento doble puede tener aristas clandestinas, efluvios y elixires plenos de pasión. Tienes razón Elvi querida, pero esa conciencia intelectual de los sentimientos no acierta con el noventa por ciento de la Humanidad, que es la que a mí me interesa.
Y por último, la relación amistad-amor siempre es un producto de consumo y la sexualidad es una cosa aparte, al menos para el noventa y nueve por ciento de la mentada Humanidad, y me incluyo el primero! Y era lo mismo en el Neolítico o en la Edad Media.
En suma: una carne humana deseable y deseada se basta a sí misma, sin la intervención del dogma judaico.

Laura dijo...

Es posible que la relación amigo-amante sea un intercambio casi perfecto. La amistad es amor, se ama a los amigos, se les desea bien, aunque también se da aquello de los celos, exclusividad, posesión.
Sin embargo me parece que para experimentar eso se requiere algún tipo de "educación sentimental" que pase por encima de ciertas fobias atávicas.

Marsa dijo...

Yo estoy de acuerdo contigo Rolando: amor y amistad van ligados como nube y lluvia.
Nos aman nuestros amigos y nos lo demuestran, y si los que dicen amarse (relación erótica), no se mostraran amistosos... compañeros que empatizan, no sé qué tipo de relación sería, amantes desde luego no.
Y el sexo es otra cosa, aunque también se puede dar entre amigos y entre amantes.
Esto pertenece al mundo de las ideas, luego vendrá el mundo de las emociones y veremos que no todos/as podemos sentir igual.
Estamos llenos de diferencias y matices... incluso muchos quedan amputados para algún sentimiento, aunque digan que aman y hablen de sus amigos/as.
Conflictivo ser humano.